2 de octubre, ¿No se qué?…

Otra vez, una marcha del dos de octubre, aquella fecha que no se olvida, esa en la que un día después el año de 1968 amaneció “Soleado”, donde solamente hubo manifestaciones aquel año y de donde surgieron muchos movimientos, pensamientos y gritos de inconformidad y justicia.

Actualmente México está pasando por una situación difícil, estafas, huracanes, terremotos y la política de siempre, la represión e injusticias de tiempos anteriores y la actual; tiempos que son un parteaguas critico en el ámbito social, y mismos que le han dado un golpe duro a la nación en todos los aspectos, crisis.

Este dos de octubre se celebraron 49 años de aquella matanza que sobra mencionar el por qué, casi medio siglo de aquel momento histórico estudiantil, algunos los tacharon, otros los apoyaban, lo que sí se sabe es que aún se recuerda.

La cuestión aquí es… la marcha fue pequeña, no hubo mucha gente, eso sí, los que estaban no dejaban que esto fuera impedimento para hacer notar las insignias, las pancartas y la protesta, unos cuantos contingentes, CCH´s, UAM, Filos, Polacas, el comité del 68 y otras escuelas y organizaciones.

Aquí el punto es ¿Es una ausencia de gente buena o mala?, refiriéndonos a que en la Ciudad se ha necesitado apoyo últimamente de muchos sectores sociales, cuestión que está activa, jóvenes de muchas escuelas están ayudando en Morelos, Puebla y Oaxaca, se trasladaron y se encuentran repartiendo víveres o removiendo escombros.

Si la ausencia es por esta cuestión, es de honor y gloría realizar estos actos, no demeritando la marcha, ya que unos aquí y otros allá, todos haciendo algo por salir adelante, la otra cara de la moneda es ¿Falta gente porque ya se está olvidando el dos de octubre?, no hubo desastres, pocas pintas y pocas quejas, no hubo bloques de choque o gente lanzando piedras a vidrios, la participación ciudadana fue menor a la de años anteriores.

Quiero pensar que esta falta es por la primera razón, cosa que es de orgullo y que demuestra el amor por México, un amor que va más allá del grito y la marcha, que de misma forma son válidas.

Algo es seguro, el dos de octubre no se olvida, los 43 se siguen exigiendo, los pueblos siguen queriendo libertad y no represión, los derechos deben de respetarse y los valores humanos deben de florecer por parte de los “mandatarios”.

En ningún momento un fotógrafo sintió peligro, madres e hijos caminaban de la mano, banderas que sustituyen el verde y rojo por negro se veían ondear por el eje central, la música, y los puños al aire se notaban sin importar a donde vieras, la intención es la misma.

Y así, si el próximo año son dos personas o una caminando desde la plaza de las tres culturas hasta el zócalo, la marcha continuara, ni un paso atrás, mirando hacía el destino, caminando con la frente en alto, el movimiento muere hasta que la esperanza perezca, o hasta que los objetivos de justicia se cumplan, y para eso… falta un gran tiempo… aquí, en las Vegas, Catalunya, Venezuela, Turquía, Israel…

Fotografías por: David Zuriaga

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