¿Los viste jugar?
Trece equipos del Futbol Mexicano están dirigidos por hombres menores de 50 años de edad. Si te acuerdas de ellos como jugadores, acéptalo, eres un chavorruco.
Si cuando escuchas los apellidos Cardozo, Mohamed y Cristante vienen a tu mente aquellos goles envueltos en magia, cabellos teñidos de estrafalarios colores y atajadas memorables, te tengo noticias… Te estás haciendo viejo.
De los 18 clubes que conforman la Liga mexicana, 13 están dirigidos por técnicos que no rebasan los 50 años de edad, lo que quiere decir que seguro los vimos con uniforme de jugadores y a algunos en sus mejores épocas como profesionales. Los únicos que podemos dejar fuera son Ricardo La Volpe, Ricardo Ferretti y Carlos Reinoso, porque pese a haber rebasado el medio centenar de vida, seguro también te acuerdas de José Manuel de la Torre y Sergio Bueno.
Uno de los que más destaca es José Saturnino Cardozo, quien era letal ante la portería, con una pierna derecha privilegiada y una técnica inigualable. El ahora timonel del Puebla es uno de los extranjeros que más sobresalió en el balompié nacional y que vivió su época de gloria con la playera del Toluca, donde convirtió 248 goles y ganó cuatro títulos de liga. Es considerado uno de los mejores cinco extranjeros que han jugado en nuestro país, junto al “Maestro” Reinoso, Miguel Marín, Evanivaldo Castro “Cabinho” y Alex Aguinaga.
Tal vez el que está más fresco en nuestras memorias es el recién nombrado técnico de los Gallos Blancos, Jaime Lozano. A tan sólo tres años del retiro, el “Jimmy” se estrena en Primera División, pero nadie olvida a aquel mediocampista con su playera de “Hecho en CU” que defendía los colores de los Pumas, pieza clave en el bicampeonato de 2004.
Francisco Palencia (Pumas) y Diego Alonso (Pachuca) son otros dos entrenadores que nos regalaron inolvidables momentos cuando eran protagonistas de los partidos. El “Niño” perteneció al más reciente campeón de Liga con el Cruz Azul (Invierno 1997) y finalista de la Copa Libertadores 2001, además de ser dos veces monarca con el club que actualmente dirige. Era un delantero potente, veloz de mente y contundente, al que también caracterizaron su larga cabellera, las uñas pintadas de negro y ese peculiar festejo rockero, en el que tomaba el banderín de tiro de esquina como si fuera una guitarra. Alonso sustituyó a Bruno Marioni, quien por cierto también ya es técnico de los Venados en la Liga de Ascenso, con los Pumas para el Apertura 2004.
En esa Máquina campeona de Liga de 1997 también jugaba Alfonso Sosa, un medio de contención férreo, pero con buena recuperación de pelota y mucha técnica individual para habilitar a sus compañeros. Hoy es el director técnico del Necaxa.
Y si hablamos de dureza en el campo, pocos como Miguel Herrera, quien saltó a la fama como lateral derecho del Atlante a finales de los 80 y principios de los 90. El “Piojo” era igual de bravo en su faceta de futbolista. Inolvidable aquella patada al hondureño Dolmo Flores en un partido de eliminatoria mundialista rumbo a Estados Unidos 1994, efectuado en el Estadio Azteca. Después jugó en los Toros Neza, donde no tuvo que teñirse la cabellera, gracias a su rubio natural.
El líder de aquel pintoresco equipo era el “Turco” Mohamed, quien –incluso- lucía menos atlético que en la actualidad, pero no lo necesitaba. Su inteligencia y depurada técnica individual le permitieron ser el líder futbolístico y moral de un equipo que robó corazones por su atrevimiento y calidad. Llegó a la final del Verano 1997, en la que perdió con el Guadalajara.
Pasajes de los que seguro te acuerdas, porque no necesitas ser muy mayor para haber visto en acción a casi todos los hombres que hoy dirigen en la Primera División.
