Amor en línea es un filme extraordinario que vale la pena ver, es una comedia muy bien pensada que poco a poco se enreda y nos hace reír. La fórmula de la pareja dispareja funciona de forma peculiar, el abuelo, a pesar de estar deprimido por la muerte de su esposa, muestra iniciativa y ganas de vivir, el joven es un escritor, carente de entusiasmo, que no desarrolló sus habilidades sociales y anda recogiendo borrachas para tener sexo.
La actuación de Pierre Richard es magnífica, Stéphane Bissot sorprende con un rol pequeño. Fanny Valette luce guapísima y Yaniss Lespert es el desguanzado perfecto, en un París frío y nublado, sin caer en dramas, con un tono dulce, con una fotografía tan buena que no roba cámara y con una propuesta inteligente está comedia convence.
Los secretos y las mentiras se van enganchando y la bola de nieve crece de manera coherente, hasta que revienta, ahí parece que el drama lo arruinará todo, pero lo mejor está por venir.
El filme tiene tanto oficio que te conmueve, te hace reír y jamás sientes el esfuerzo. Fluye, te lleva y cuando te termina eres más feliz que cuando te sentaste, ¿hay algo más que se le pueda pedir a una comedia?, no se la pierdan, se encuentra actualmente en todas las salas comerciales.
