Normalmente pensaríamos que las cosas enlatadas jamás deberían estar en nuestra dieta, pero ¿Quién tiene tiempo para vivir 100% de cosas naturales Todo el tiempo? Aunque tu cuerpo aprecia el esfuerzo, no siempre tenemos el tiempo o la paciencia de cocinar nuestras comidas desde cero.
Así que te traemos las tres cosas que puedes comer de una lata sin remordimientos.
Legumbres Enlatadas
No hay razón alguna por la cual no puedas comer frijoles enteros enlatados la cual es una gran comodidad ya que toman muchísimo tiempo en cocerse, algunos si debes checar que no sean altos en sodio, siempre y cuando los drenes y enjuagues no tendrás problema alguno. Disfrútalos en ensaladas, guisados o incluso solos.
Vegetales enlatados
Los vegetales enlatados son otra gran opción que puedes considerar sin miedo, la misma regla del sodio aplica también, pero pueden ser agregadas a tu dieta sin temor ya que son enlatadas en su punto, lo cual garantiza todos los nutrientes que cualquier otro vegetal congelado tendrían, son súper fáciles de cargar contigo al trabajo y las puedes acompañar con lo que sea.
Pescado Enlatado
El salmón, atún y sardinas son excelentes fuentes saludables de proteína y una buena adición para cualquier dieta, ¡Aunque estén enlatadas!
Son mucho más económicos que comprarlos frescos y aun así tienen los mismos nutrientes, proteína y omega 3, también es muy fácil encontrar opciones que sean bajas en sodio.
Un buen tip es que cuando busques atún o cualquier otro pescado, las marcas que tienen trozos más grandes son los de mejor calidad.
¡A comer!
