Parte II
Debido a la gran variedad de mitos que se han derivado de la sodomía, mencionaremos las más comunes y discutidas verdades en esta práctica. Para de una buena vez dejar de satanizar el tema y dejar de ignorar información muy útil para nuestra intimidad.
1.- ¿Es una práctica que excluye a las mujeres, al ser propia entre homosexuales varones? ¡Falso! Desde tiempos remotos la sodomía es realizada entre parejas heterosexuales y es un mito que sea excluyente de las mujeres. Un porcentaje de entre 5 y 10 % lo practica en forma regular. De 3,500 adultos encuestados, el 25% ha practicado al menos una vez sexo anal en su vida. Entre mujeres de 25 a 39 años, un 12% ha tenido sexo anal satisfactoriol. También encontramos que cada vez aumentan más las cifras de hombres que han probado sexo anal penetrados por sus parejas femeninas. Con lo que se despeja la duda: que sea una práctica exclusiva ente varones o estar ligada solo a la homosexualidad.
2.-¿Es doloroso? Cierto. Aunque esto se modifica con la frecuencia. El ano es un músculo que no emite ninguna lubricación, así que debes ayudarte con lubricantes sintéticos y relajantes para evitar el dolor. Sobre todo las primeras veces, mientras que tu cuerpo y órganos se adaptan y acostumbran hasta que puedas disfrutarlo y dominarlo.
3.-¿Conlleva a la enfermedad? Cierto. Las prácticas anales deben ser con suma responsabilidad e higiene, así como protegidas con preservativo, de otra forma hay grandes posibilidades de contraer infecciones o enfermedades venéreas aún más fácilmente que por vía vaginal u oral. Incluso el VIH ha sido propagado de esta forma de forma más acelerada. Por ello debemos tomar precauciones y cuidados extremos.
4.-¿Se trata de un acto desviado y contra natura que no aporta placer sino perversión? ¡Falso! Sin importar las preferencias sexuales que un individuo pueda tener, cualquier práctica sexual consensuada con nuestra pareja no puede ser un acto desviado, o una práctica perversa, sino una forma de probar, divertirse y una forma de materializar el amor y el gusto que se siente por el otro. Aunque si ya has probado y no te ha gustado, tampoco estas obligado a practicarlo.
5.- ¿Es sucio? Probablemente este punto es el más confuso. Y esto por tener dos acepciones. La primera en lo que refiere “sucio” para conceptualizar la parte física…. muchas parejas se abstienen por miedo a “ensuciarse” y esto es cierto. Al practicar la sodomía, inevitablemente el pene recoge residuos fecales, llegando a ser una práctica “sucia”. Y la segunda nos refiere a la conceptualización ideológica: como un sinónimo para denominar que es una práctica denigrante y esto no es cierto. Así que podemos afirmar que es sucio por que debemos “embarrarnos” al practicarla. Y que ideologicamente no es algo “sucio” sino erótico.
Átrevanse y los esperamos en la parte 3 de esta entrega.