Calexit: movimiento separatista de California

¿Te imaginas un Estados Unidos sin California?

La campaña Yes California Independence, fue impulsada en 2014 para promover la separación del estado de California de la Unión Americana y tuvo su impulso en las redes sociales al grado de convertirlo en un movimiento independentista con gran fuerza tras la victoria de Donald Trump en las pasadas elecciones presidenciales de Estados Unidos.

Este movimiento, ahora identificado como Calexit en referencia al “Brexit” del Reino Unido, sostiene que California siendo la primer economía del país y la sexta más grande del mundo, con una población de más de 39 millones de habitantes[1] (equivalente a países como Polonia y Canadá) sufre de un exceso de regulación federal, en el que el Estado contribuye con más impuestos federales de lo que recibe, estando aislado del poder político en Washington D.C., con una gran brecha política y cultural con el resto del país.

Con la creación en 2016 del Partido Nacional Secesionista de California[2], este movimiento presentará una iniciativa ciudadana que pueda dar pie a un referéndum a favor o en contra de la independencia de California para la primavera de 2019.

Sin embargo, debido a que la Constitución estadounidense no permite la salida de un estado de la Unión, la viabilidad del “Calexit” depende de una reforma constitucional, que requiere la aprobación de 2/3 del Congreso y 2/3 del Senado, y de al menos 38 estados, o convocar una convención de estados y plantear ante sus legisladores la separación de California; también con un mínimo de 38 estados a favor.

En la actualidad vemos movimientos independentistas similares a este en el mundo, que más allá de compartir un territorio, no comparten una identidad, historia, aspiraciones e intereses económicos en común, como lo es el caso de Escocia, en Reino Unido; Cataluña y País Vasco, en España; o Quebec en Canadá por mencionar algunos. En ellos existe una evidente brecha cultural, política y social, donde el tema de los fondos provenientes de la federación también es detonante.

Si bien todos estos movimientos separatistas comparten similitudes, a diferencia, California carece de un sentimiento nacionalista, de historia y tradiciones compartidas por los californianos, aun siendo un estado multicultural, es un estado muy representativo del sueño americano.

Por un lado, la Unión Americana no permitirá la salida de California, cuando ésta representa ser un gran pilar en la economía del país. De igual forma, la economía de California se beneficia al ser parte de la Unión con inversiones y una moneda fuerte.

La realidad es que las opciones que tiene California para lograr su independencia son poco probables, al igual que en otros estados, el tema legal y político ha sido un factor determinante para obstaculizar el movimiento, y eso solo imaginando que la mayoría de los californianos compartan el deseo de la separación.

Vale la pena destacar el surgimiento y la fuerza de estos movimientos sociales ante la semilla del racismo sembrado por Trump. En California, donde aproximadamente el 40% de la población es de origen hispano, y donde existen un mayor número de “ciudades santuario” este movimiento ha logrado alzar la voz y promover la unión en tiempos de incertidumbre.

   

[1] U.S. CensusBureu, State&County Quick Facts CA. disponible en: https://www.census.gov/quickfacts/table/PST045216/06

[2] Inspirado en el Partido Nacional Escoces que defiende la independencia escocesa

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