Elementos que deberá considerar AMLO para ser presidente de México

Rumbo al 2018

Para iniciar con la restauración del deterioro social en que se encuentra México, hay que revertir el daño económico, político y social, por las privatización de las empresas del Estado y las paraestatales, así como por las reformas estructurales puestas en marcha, dañando la soberanía.

Ante tal afectación al pueblo, es eminente una trasformación en el rumbo del destino de la nación, en el modelo económico neoliberal impuesto por los tecnócratas, obedeciendo los designios de los organismos internacionales y los EE.UU. Dándole un giro hacia la recuperación y mejora de la economía, en el próximo sexenio, que empieza en el año 2018.

De acuerdo a lo anterior, es relevante comenzar a pensar en el futuro hacia el 2018 y quién asuma la responsabilidad del país, deberá ser aquel que ponga esa carga sobre sus hombros, de dirigir los designios de la nación. El futuro presidente o presidenta de este país, debe ser un nacionalista, es decir, haber mostrado amor y compromiso por su país, conocer la historia de México, no tener intereses, ni compromisos con el extranjero,  estar preparado para llevar las riendas de una nación por el camino correcto; de libertad, de independencia, dirigir al país, por el sendero del cambio y el crecimiento económico.

Y otro elemento fundamental para iniciar con tan esperado cambio, es el de contar con un candidato a la presidencia que pueda contar con un gran número de ciudadanos que estén dispuestos a dicho cambio. El planteamiento concreto, es que sea respaldado e impulsado por un Frente de Organizaciones Sociales y Políticas, además de uno o más partidos políticos; podría ser Andrés Manuel López Obrador, pero él o cualquiera deberá considerar las siguientes diez razones:

1. Dadas las condiciones político sociales que existen actualmente en el país, la credibilidad y el campo de acción de los partidos políticos, es mínimo y limitado. Se requiere un respaldo de mayor envergadura para lograr el objetivo.

2. La historia nos ha enseñado que cuando ha llegado un candidato de esa talla, a la presidencia en un determinado país, es porque ha contado con el apoyo de un frente de partidos y asociaciones político sociales a nivel nacional. Como fue el caso de Luiz Inácio Lula da Silva en Brasil, 1 de enero de 2003.

El de Salvador Allende en Chile en 1970 o el acenso a la presidencia de Evo Morales en Bolivia en 2005b y otros más.

3. En México el caso de Cuauhtémoc Cárdenas en 1988, cuando fue candidato a la presidencia respaldado por el Frente Democrático Nacional, formado por algunos partido y organizaciones político sociales. Lo que se sabe es que él que realmente ganó y la presidencia fue usurpada, por Carlos Salinas.

4. El porcentaje que sitúa al candidato en las preferencias electorales a la presidencia, es Andrés Manuel López Obrador, el partido que lo respalda es Morena, sólo que cuenta con poco tiempo de haber sido creado. A pesar de su gran crecimiento, no cuenta con gubernaturas, tiene no más de cinco senadores, dos o tres decenas de diputados y aunque es mayoría en la Asamblea de la Ciudad de México, no es quien la dirige, pues los otros partidos; formaron un bloque para contrarrestarlo.

5. Los partidos contrarios a López Obrador y a su política son: principalmente el PRI, PAN, PRD, a la cabeza, pero los otros existentes, también, excepto el PT (pero no hay nada escrito, al respecto).

6. Estos partidos junto con el aparato de Estado, el grueso de los medios de comunicación y la plana mayor empresarial, han venido realizando una campaña en contra de él, campaña de desprestigio que lejos de aminorar ha ido en acenso y se espera que se recrudezca todavía más.

7. Se dice que López Obrador ganó las elecciones de 2006 por medio de “un fraude” y que en el 2012 se repitió la misma escena. Surge la pregunta: ¿Cómo detener un posible nuevo fraude? La respuesta es con un frente de organizaciones sociales, uno o dos partidos políticos y la ciudadanía organizada por dicho frente.

8. El frente de organizaciones deberá responder a los intereses de la ciudadanía y a las necesidades reales de la nación, la de la transformación y restauración de la economía y el tejido social para el desarrollo económico.

9. El mismo candidato ya sea López Obrador o cualquier otro u otra deberá responder a los intereses de la nación.

10. También el candidato o candidata deberá comprometerse con la plataforma política del frente de organizaciones e implementarla dentro de su plan de gobierno, en otras palabras, deberá de gobernar con esta y algunos de sus líderes o actores políticos, preparados y con una clara honestidad, comprometidos con las necesidades del país. Desde luego que no deben faltar los especialistas e intelectuales de cada una de las ramas de gobierno, es decir, el pueblo y la ciudadanía deben gobernar conjuntamente con el nuevo gobierno.

 

Fuentes:

José gil Olmos (2013) Revista Proceso http://www.proceso.com.mx/352522/un-siglo-de-fraudes

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos necesarios están marcados *

Todos los Derechos Reservados Feel ® 2016
Develop & Design: JG