5 platos que no puedes dejar de probar en Colombia

Además de su gente, sus encantadores paisajes y maravillosa biodiversidad, Colombia también es reconocida por su exquisita gastronomía. La principal característica de la comida colombiana es su diversidad. Al ser un país tan grande, con tantas regiones y culturas diversas, el arte culinario varía drásticamente con la geografía. Ello es excelente para quienes gustan de los recorridos gastronómicos porque pueden probar las delicias que ofrece cada región. Para ti, que quieres probar y vivir los platos locales, hoy redBus ha preparado un especial con cinco platos que no puedes dejar de probar. ¡Acompáñanos a ampliar nuestro paladar mientras viajamos por Colombia!

1. Lechona, Tolima y Huila

Uno de los platos más tradicionales del Tolima y el Huila, que antes constituían el llamado “Tolima Grande”, es la lechona. El plato se compone de carne de cerdo y arveja, y aunque se come todo el año, es más popular en épocas decembrinas y de fin de año. La lechona se sirve sobre una bandeja, con la cabeza del cerdo completa y el cuerpo abierto relleno de la carne y las arvejas preparadas.

Aunque es un plato originario del suroccidente del país, su consumo se ha popularizado en toda Colombia, especialmente en Bogotá. Aquí se pueden encontrar muchas lechonerías, en su mayoría fundadas por migrantes tolimenses en la capital. La lechona que se hace en otras partes del país se prepara con arroz, cosa que a los puristas no les agrada mucho. Sea como sea, la lechona tolimense es un plato delicioso que no te puedes perder.

2. Bandeja Paisa, Antioquia y Eje Cafetero

Este es, quizá, el plato más reconocido de la gastronomía colombiana a nivel nacional e internacional. Su origen es español y portugués, con platos como la frijolada o ‘feijoada’ siendo prácticamente equiparables. Se compone de fríjoles, chicharrón de cerdo, carne molida, plátano maduro, aguacate, arepa blanca, chorizo y huevo. Era un plato popular entre los arrieros, pioneros que colonizaron el departamento de Antioquia, debido a su alto nivel nutricional y calórico, necesario para el arduo trabajo que se requería.

3. Ajiaco santafereño, Sabana Cundiboyacense

La Sabana Cundiboyacense, que comprende buena parte de los departamentos de Cundinamarca, Boyacá y Bogotá, la capital, es una unidad cultural. Este era el país de los muiscas, el pueblo indígena más desarrollado del país. La gastronomía muisca ha influido notoriamente en la cocina colombiana contemporánea y el ajiaco santafereño es prueba de ello. En épocas prehispánicas, el ajiaco se preparaba con carne de venado, maíz y papa. Hoy en día, el venado se ha reemplazado con pollo mientras que la base sigue siendo la misma.

Es uno de los platos más recomendados para los turistas que visitan Bogotá, pues muestra la riqueza de la cocina de la zona con ingredientes tradicionales. Se suele servir en restaurantes típicos con arroz, aguacate y mazorca. A menudo se sugiere agregarle crema de leche y alcaparras para reforzar su suave sabor. ¡Es un plato delicioso que tienes que probar cuando vengas a la capital!

4. Chuleta Valluna, Valle del Cauca y Norte del Valle

El Valle del Cauca es una región muy particular del país, con una cultura única y valiosa. Es hogar de muchos escritores, artistas, cineastas, deportistas y chefs. En el Valle del Cauca la gastronomía es especial, con preparaciones como el champús, la lulada, el pandebono y el cholao, bebidas y pasabocas propios de la región. El plato valluno por excelencia, no obstante, es la famosa chuleta.

Se prepara con un corte de centro de pierna que se adoba y se apana con harina de trigo, huevo batido, comino, orégano y sal. Se sirve con papas a la francesa, arroz con pollo o blanco, aguacate y plátano maduro. Para acompañarlo se ofrece usualmente una buena lulada, preparada con lulo, azúcar y hielo.

5. Chigüiro asado, Llanos Orientales

El chigüiro o capibara es el roedor más grande del mundo. Es oriundo de la región de los Llanos Orientales, habita en las sabanas y llanuras de la Orinoquía, desde Colombia hasta Venezuela. Ello hace que en esta región se consuma con frecuencia y se prepare de forma variada y deliciosa. La preparación más típica es asada, en una hoguera grande en la que usualmente se asa la mamona y la carne a la llanera. Es una carne muy suave y jugosa que muchos consideran la más deliciosa del mundo.

¡Visita Colombia y prueba la variedad de sabores que ofrecen sus ciudades! ¡Te encantarán!

Autora: Mayra Lázaro

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