Buscan sacudir.
México, 22 sep (EFE).- La película mexicana “7:19”, que recrea una historia humana en el terremoto de 1985 en la Ciudad de México, sirve de retrato para un país que en la actualidad vive “un terremoto social”, lamentaron hoy el director de la cinta, Jorge Michel Grau, y su protagonista, Demian Bichir.
“Estamos viviendo hoy en día un terremoto que nos está aplastando y es difícil poner cara a la tragedia”, dijo a Efe Michel Grau, horas antes del inicio este viernes de la exhibición del filme en las salas del país.
Con los actores Demián Bichir y Héctor Bonilla, la película de 96 minutos cuenta la historia de un empresario y un velador que se quedan atrapados junto a otras personas después del derrumbe de un edificio y debajo de los escombros comienzan a vivir una experiencia de supervivencia.
En la lucha por no morir, los atrapados reflejan la idiosincrasia de los mexicanos y hay momentos de solidaridad, de reflexiones y de humor en condiciones extremas, como cuando uno de los enterrados menciona que su canción favorita es “Todo se derrumbó”.
Demián Bichir, uno de los actores más reconocidos de México en la actualidad, encarna al empresario que en un momento determinado siente culpa porque el edificio caído le dio millones de pesos, pero a cambio de tratos que incluyeron hacerlo con materiales baratos, lo cual lo hizo sensible al colapso con el sismo.
En un momento el velador ofende al jefe por corrupto y también lo hacen otros personajes que nunca salen en cámara; sin embargo se unen en la desgracia, y un humilde vigilante representado por Bonilla bebe su orín para sobrevivir y al terminar le pasa el jarro al empresario para que haga lo mismo y se hidrate.
“En México vivimos en un terremoto constante, financiero, moral social, económico; parece nuestra condición, parece que nos hemos acostumbrado y debemos romper esos malos hábitos porque merecemos un mejor país”, señaló Bichir, quien criticó la corrupción de la clase política mexicana que roba sin pudor y luego duerme tranquila.
“7:19” fue proyectada hoy para un grupo de estudiantes del Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM), una de las universidades más reconocidas del país, que intercambiaron opiniones con Michel Grau y Bichir.
Los alumnos no habían nacido el 19 de septiembre de 1985, cuando a las 7:19 de la mañana un temblor de 8,1 en la escala de Ritcher ocasionó varios miles de muertos y sembró el pánico en la ciudad, pero declararon entender lo que sintieron las víctimas porque, concentrados en la película, vivieron los derrumbes y las escenas de terror.
La idea de la cinta surgió hace unos cuatro años como parte de un ejercicio cinematográfico para tratar el tema de la frontera entre la vida y la muerte y se llevó a la pantalla hasta ahora porque los fondos no estaban disponibles para terminarla para el XXX aniversario celebrado el año pasado.
El director se acercó al cronista del sismo Iván Salcido, quien facilitó contactos a Michel Grau y acceso a historias reales, algunas de las cuales fueron desgarradoras como la de un hombre que fue a buscar el periódico y al regresar no tenía ni casa ni familia.
Filmada en cuatro semanas en los Estudios Churubusco de la capital mexicana la película podrá verse desde este viernes en 11 ciudades mexicanas. EFE
