Incompatibles es el título en Netflix para este filme francés, cuyo nombre original es De l’autre côté du périph, que explota la fórmula de la pareja dispareja, es una comedia policiaca que inicia bien y llega tropezando hasta el final. Entretiene pero no convence.
Omar Sy, famoso por Intouchables (2011) y Chocolat (2016), interpreta a un policía de barrio que se mueve a tumbos entre la rebeldía y la ingenuidad. Omar baila, viste y se comporta igual que en Intouchables. Su personaje se parece tanto al otro que a ratos olvidas que es policía. Incluso creo que el multifamiliar que aparece es el mismo.
El otro lado de la balanza, la buena actuación de Laurent Lafitte logra evitar que la película se hunda, su personaje es un pésimo policía, solitario, medio fracasado y mamón, que se conforma con andar entre los peces gordos sin pisar callos.
La película busca atender a todos los públicos y para ello incluye un par de secuencias buenas con un personaje infantil (el súper y el videojuego) así como una historia de amor entre el protagonista y Sabrina Ouazani. El romance es tan tibio y forzado que ella no se entera.
La película vale la pena sólo para desapendejar a quienes todavía creen que Francia es un país perfecto. Aquí se muestran la corrupción y el racismo parisino. Obviamente el final feliz se ve venir desde lejos con todo y moraleja de por medio.
