Las matemáticas se pueden encontrar en todos los aspectos del fútbol, de la misma manera que se pueden encontrar en todas las facetas de la vida.
Las matemáticas del fútbol
Si alguien nos dijera que se pueden aprender matemáticas viendo un partido de tu equipo favorito o que la diferencia entre Messi y Cristiano Ronaldo es cuestión de desviaciones estadísticas, la mayoría le tacharía de loco. Aunque no falten razones para tal calificativo, las matemáticas y el fútbol tienen muchas cosas en común
Las matemáticas se pueden utilizar para explicar el fútbol, y el fútbol ayuda a explicar matemáticas. La frase no podía tener otra autoría que la de un apasionado o loco por esa ciencia y por el deporte rey, las dos aficiones que ha juntado David Sumpter en su libro Fútbol y matemáticas. Aventuras matemáticas del deporte rey.
Sumpter (Londres, 1974), profesor de Matemáticas aplicadas en la Universidad de Upsala (Suecia) y entrenador de un equipo de fútbol infantil en sus ratos libres, defiende su trabajo porque las matemáticas deberían estar inmersas en la vida diaria, como ya lo está el fútbol.
Este autor comenta a Efe que no pretende con este libro proporcionar algunos hechos matemáticos relacionados con el fútbol que se puedan explicar con los amigos en la barra de un bar, sino que se trata de “cambiar la forma de mirar, tanto de las matemáticas como el fútbol. Creo que tienen mucho que ofrecerse el uno al otro y, aunque las matemáticas no pueden competir con el deporte del balón, pueden aprender mucho mutuamente.
Para este seguidor del Liverpool inglés, el fútbol y las “mates” parten desde el mismo punto. El fútbol de las `leyes del juego´, las reglas establecidas por la Federación Internacional de Fútbol Asociación (FIFA). Lo que los entrenadores de fútbol deben resolver es el problema de cómo conseguir que su equipo gane dentro de los límites establecidos de las reglas.
Por otro lado, las matemáticas tienen su propio conjunto de normas que los matemáticos deben aplicar para conseguir las respuestas correctas a las preguntas que se plantean. Al seguir esas reglas, y con un poco de inspiración, tanto los futbolistas como los matemáticos buscan conseguir su objetivo. El entrenamiento y las matemáticas empiezan con la teoría.
El autor londinense pone nombres sobre la mesa para hablar de esta unión, que en principio parece extraña. Puedes regatear como Messi o tocarla como Beckham, pero si el equipo carece de estructura, nunca tendrás la oportunidad de demostrar tus habilidades.
Requerido por Efe Reportajes, Sumpter se atreve a argumentar matemáticamente hechos destacados en la historia del fútbol, como la famosa mano de Dios de Maradona en el Mundial de México en 1986.
Fue un gol aleatorio. Mucho de lo que sucede en el fútbol es por azar. De hecho, dos terceras partes de lo que sucede puede calificarse como azar. Cualquier otro día, con el árbitro en un ángulo ligeramente diferente, Maradona podría haber enviado fuera el balón y la historia de esta jugada hubiese sido distinta El argentino fue un jugador fantástico (y lo digo como inglés) e incluso sin tener en cuenta ese gol, deberíamos admirarlo.
A la pregunta de si una tanda de penaltis, como la vivida en la última final de la Champions League entre Real Madrid y Atlético de Madrid, ¿tiene algún razonamiento matemático?, Sumpter comenta a Efe:.
Sí, encontrando la posibilidad de marcar con un lanzamiento desde cierta posición. Los lanzamientos a la derecha del portero funcionan ligeramente más que los que se lanzan a la izquierda y eso está estudiado estadísticamente.
A lo largo de este libro, que no sólo es una manera diferente, entretenida y curiosa de aprender matemáticas, sino que permite al amante del deporte disfrutar del juego viéndolo desde una nueva y apasionante perspectiva, el británico intenta dar respuestas matemáticas a cuestiones que se plantean en el fútbol.
MESSI O RONALDO, UNA DESVIACIÓN ESTADÍSTICA.
¿Quién es mejor, Messi o Ronaldo?, se pregunta. Se trata de una cuestión de desviaciones estadísticas, responde. ¿Por qué es tan efectivo el “tiqui-taca” del Barcelona?, cuestiona. Se trata de una cuestión de geometría y dinámica, zanja el autor.
Sumpter ha estudiado el juego de Messi y del F.C. Barcelona y asegura que es un sistema muy matemático y efectivo.
Forman triángulos que llenan el campo y juegan con simetría bajo los círculos. Messi, Rakitic y Alves forman un triángulo en la parte derecha. Por otra parte Neymar, Iniesta y Alba forman otro en la izquierda. Ellos se rotan la pelota desde estos triángulos y se conectan gracias a un triángulo más grande con Busquets en la parte trasera.
El autor inglés explica que el futbol me ha ayudado a comunicar las matemáticas. Y las matemáticas nos pueden ayudar a todos a comunicarnos sobre el fútbol. Desde las apuestas a la estrategia, desde el ataque sincronizado a la presión de seis segundos, desde la geometría del equipo a las estadísticas de los jugadores, las matemáticas se pueden encontrar en todos los aspectos del juego, de la misma manera que se pueden encontrar en todas las facetas de la vida.
Para concluir, este profesor de matemáticas aplicadas, dice: las “mates” nos permiten apreciar de verdad cómo los jugadores crean y estrechan espacios, la física de los goles, los cambios de táctica, la cooperación en el equipo y la distribución de pases. También nos permite ganar un poco de dinero en las apuestas y comprender por qué, a veces, tenemos suerte y otras veces no.
JUAN A. MEDINA.
EFE/REPORTAJES.