Hoy hablaremos de los resultados más importantes pero no únicos, de un estudio realizado en 3 países (México, EUA y Reino Unido) donde la pregunta fue ¿qué significa ser hombre? Con el fin de indagar y responder a esta pregunta se construyó una herramienta analítica llamada “caja de la masculinidad”…
¿A qué llamamos caja de la masculinidad?
Llamamos así a un conjunto de creencias trasmitidas por los padres, las familias, los medios de comunicación, los pares, las mujeres y otros miembros de la sociedad que presionan a los varones para que se comparten de una cierta manera.
Estas presiones les exigen valerse por sí mismo sin pedir ayuda, actuar como machos, “ser físicamente atractivos”, ceñirse a roles de género que son rígidos, ser heterosexuales, realizar proezas sexuales y resolver los conflictos por medio de la agresión.
La caja es una forma de interiorización de estos mensajes y presiones que les comunican, entre otras cosas, que “un chico que no confronta una provocación física es débil” o “que un gay no es un hombre de verdad” entre otros argumentos, quien se encuentra “fuera de la caja” son todas aquellas personas que R O M P I E R O N con estas expectativas que rechazan estos comportamientos y en su lugar adoptan ideas y actitudes más positivas y originales sobre lo que debe creer un hombre y sobre cómo debe actuar.
La vida en la caja de la masculinidad
¿Los hombres que están dentro de caja de la masculinidad, son más felices o más infelices?
En México no se encontraron vínculos entre las actitudes propias de estar dentro de la caja y la satisfacción con la vida o el bienestar. Sin embargo, en Estados Unidos y Reino Unido, sí, aparentemente los jóvenes que están dentro de ella se sientes recompensando de alguna manera por llenar todo ese cúmulo expectativas sociales.
¿Y su salud mental?
En los tres países resulto preocupante, sus pretensiones ocultan profundas inseguridades, depresión y frecuentes pensamientos suicidas.
Amistad y apoyo, ¿existe en la caja?
Es más probable que los hombres jóvenes reporten brindar apoyo emocional a otros que sentirse emocionalmente vulnerables o buscar ayudar para ellos mismos. De conformidad con la norma dictada por la caja de la masculinidad según la cual los hombres deben valerse por sí mismos sin pedir ayuda.
Comportamientos de riesgo:
La caja de la masculinidad es un lugar de comportamientos sumamente riesgosos, particularmente de borracheras extremas y conducir en estado de ebriedad. Muchos jóvenes asocian el “ser un hombre de verdad” con el abuso del alcohol y la conducción en estado de ebriedad arriesgando así sus vidas y la de los demás al tratar de cumplir este estándar perjudicial.
Atractivo físico:
Las nociones de los hombres jóvenes acerca del atractivo físico a un día de hoy se asocian concretamente con la masa muscular y la figura corporal y no con un sentido de la confianza y el atractivo más interior e individual.
Bullyng y violencia:
La caja de masculinidad es un sitio sumamente violento y con repercusiones negativas para los hombres jóvenes y para quienes les rodean.En México, los que se ajustan al primer perfil indican haber cometido acoso sexual tres veces más que los que se ajustan al segundo perfil.
Resultado:
Los jóvenes que se ajustan a las reglas de la caja tienen mayores probabilidades de arriesgar su salud y bienestar, apartarse de sus amistades cercanas, resistirse a buscar ayuda cuando la necesitan, sufrir de depresión y pensar con frecuencia en poner fin a sus vidas.
También tienen mayores probabilidades de usar la violencia contra otros —verbal, virtual y físicamente— y de acosar sexualmente a las mujeres.
Lo mismo se revela en lo que respecta a sufrir violencia en carne propia, practicar comportamientos riesgosos como emborracharse y tener entre dos y tres veces más accidentes de tráfico. Al mismo tiempo es menos probable que entablen relaciones y amistades estrechas.
¿Liberarse de la caja?
El proceso de liberarse de la caja de la masculinidad no es perfectamente lineal y tampoco sencillo.
El estudio revela algunas tendencias contradictorias. Los hombres jóvenes que están dentro de la caja se muestran más satisfechos con sus vidas, aunque por ejemplo, presentan más síntomas de depresión.
Estos jóvenes obtienen ciertos beneficios al permanecer en la caja de la masculinidad: los dota de un sentido de pertenencia y de estar a la altura de lo que se espera de ellos. Es posible que sus amigos y sus padres los alaben, pero cuando esas mismas normas los encaminan a ser agresivos, a evitar tener amigos gais, a reprimir sus emociones y a pelear cuando alguien los amenaza, la caja les exige que aparenten ser lo que no son.
Los resultados del estudio evidencian cuán violenta y solitaria puede ser este tipo de vida.
Todos juntos… en la caja ….
Los hombres jóvenes necesitan apoyo para liberarse de la caja, pero no lo pueden hacer solos.
En este contexto, todas y todos nosotros — hombres y mujeres jóvenes, padres, educadores, medios de comunicación, maestros, compañeros y compañeras sentimentales y todos los demás miembros de la sociedad— tenemos un papel que cumplir en cuanto a reforzar todas las ideas positivas, equitativas y no restrictivas sobre la masculinidad.
En otras palabras, es hora de que todos nos propongamos liberarnos de la caja de la masculinidad.
Si deseas revisar el estudio completo: https://promundoglobal.org/wp-content/uploads/2017/03/PRO17003_report_ES_007.pdf